Nunca podés solo. Sí, hay marañas que se desenredan en completa soledad. Pero no hay manera de que a las grandes hazañas puedas hacerlas solo. Hasta una flor puede sostenerte en el camino.
Los objetos también tienen vida porque nosotros los tocamos con nuestra esencia. De ahí el hecho o la verdad de que se vuelvan indispensables. Soy muy fetichista. Y me encanta. Un detalle o un color me pueden cambiar el día. No es algo que decido. Es algo que me pasa. Por eso nunca podés solo. Y todo lo que te rodea, en definitiva, es tu compa del camino. A veces junto ramas, por no decir "casi siempre". Y voy caminando con la rama por las calles del barrio. Y con la rama señalo y con la rama marco límites. ¡Y la rama me acompaña! ¡Me sostiene en el camino! A veces una flor de un Crespón puede embellecer toda una llegada. Y de hecho lo hace. La embellece. Porque es la flor más bella de todas. Del árbol más oriental del mundo. Con hojas que merecen ir a parar a un vasito de agua. Y uno dice "ir a parar" como si no estuviese "arrancando" en realidad. Quiero decir: poniendo el pie en el pedal y avanzando hacia el futuro. Los objetos también tienen vida porque nosotros los tocamos con nuestra esencia. De ahí el hecho o la verdad de que tanto un objeto como un ser humano merecen que uno los tenga y también los lleve a todas partes. Claro que uno no habla de acumular por acumular, sino de elegir qué clase de simbolismos son los que te pertenecen. Qué clase de personas querés que te iluminen. Y en qué momento oportuno hay que apagar la luz o encenderla. Para que todo esté en armonía. Para que tengas la mañana más mañana de todas. Para que sepas que nunca estuviste solo. ¡Por eso llegaste hasta acá, compañero! Porque todo lo que te rodea te fue direccionando. Y es bueno que eso pase. Porque sos un pez en un enorme río. Porque sos un enorme río transformado en un hermoso y necesario pez.
🖊️ Agustina Ferrand
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